SUPERVIVENCIA - A tener en cuenta

31.03.2013 07:05

 

Consideraciones especiales de supervivencia:

 

Las técnicas de supervivencia designan al conjunto de conocimientos que permiten alimentarse, calentarse, protegerse del mal tiempo e incluso aplicar conocimientos médicos cuando uno se encuentra aislado en la naturaleza. Estas técnicas principalmente se fundamentan en la utilización de objetos que pueden encontrarse en el medio ambiente, reduciendo en lo posible el uso de objetos artificiales (como mecheros, cuchillos…). Sin embargo, algunas de estas técnicas se basan en el principio de que se dispone de un mínimo de instrumentos, generalmente reunidos en un kit de supervivencia. Los métodos de supervivencia son diferentes según el lugar donde se encuentra. Hacer fuego con trozos de madera en el desierto o encontrar un camello en un bosque - por ejemplo -, puede ser muy difícil. Estas técnicas, hoy día, son aprendidas por los cuerpos militares, las personas que pretenden hacer estancias largas o trayectos por zonas poco habitadas (bosques, desiertos), o a los que desean aislarse de la sociedad, deseando prepararse para una eventual desaparición brusca de su modo de vida, o que desean poder hacerle frente a situaciones catastróficas. Pero en el Japón feudal, eran prácticas habituales en cualquier ryû, ya fuese esta, samurai o ninja.

 

Análisis general en una situación de supervivencia:

  1. Analizar la situación para organizar un plan - Quizá hay heridos, o alguna amenaza de peligro. Fijar un perímetro de vigilancia, encontrar agua, alimento y refugio, siempre es lo primero.
  2. Establecer prioridades - Hay que tener en cuenta los peligros del entorno y cómo evitarlos. En ocasiones, dependiendo de cada situación concreta, habrá que alterar el orden de las prioridades o sustituir unas por otras (por ejemplo: prestar primeros auxilios, preparar las señales, abastecerse de agua, procurarse un refugio, abastecerse de comida, y prepararse para desplazarse).
  3. Preparar un inventario - Prepararnos para abastecernos por nuestros propios medios antes de que se agoten las reservas.
  4. No tener prisa, salvo en los casos de urgencia médica - La conservación de nuestra energía es un factor más importante que el tiempo. Por otro lado, el agotamiento por una actividad física sin un objetivo preciso provoca una situación de desamparo que socava nuestra moral. Por ello, todo lo que hagamos tiene que responder a un plan y un objetivo preciso:
  5. Recordar dónde te encuentras - Probablemente tendremos que alejarnos del lugar del accidente o de nuestra base o refugio para explorar los alrededores. En estos casos hay que tomarse un tiempo en analizar los rasgos del paisaje y hacer un mapa mental del lugar. Debemos marcar el camino para poder volver sobre nuestros pasos y no perdernos, pues el golpe psicológico que provoca esta situación es durísimo.
  6. Dominar el miedo y el pánico - Hay que mantener la mente ocupada con estas medidas. Debemos ser optimistas y confiar en que seremos rescatados o que podremos salir por nuestros propios medios; pero también debemos prepararnos para afrontar futuros problemas.
  7. Improvisar - En una situación de supervivencia siempre hay algo que hacer. Utilizar nuestra inventiva y creatividad aumenta nuestra confianza.
  8. Valora tu vida - Si perdemos la voluntad de sobrevivir y el deseo de mantenernos con vida, el conocimiento de estas técnicas es inútil. No debemos correr riesgos innecesarios que puedan provocarnos un accidente.

A) Prioridades de la supervivencia:

1 - Las prioridades fundamentales de supervivencia humana siguen una regla de tres puntos:

  • Los humanos no sobreviven más de 3 minutos sin aire (no se refiere a aguantar la respiración conscientemente).
  • Los humanos no sobreviven más de 3 días sin agua.
  • Los humanos no sobreviven más de 3 semanas sin comida.

2 - Pero en la mayoría de los casos de supervivencia, son otras las 3 prioridades:

  • Una actitud positiva es fundamental.
  • Encontrar o crear un refugio es importante porque permite a la persona estar protegida de los elementos.
  • Los humanos pueden vivir 3 días sin agua, no desgastarse inútilmente. El éxito de la supervivencia muchas veces depende más de factores como las condiciones climáticas o el estado físico.

3 - Estas prioridades pueden cambiar dependiendo de las condiciones del entorno.

B) Refugio:

  1. La función principal del refugio es protegernos de los peligros del medio ambiente. Un calor extremo puede producir un sincope o un golpe de calor; y el agotamiento por calor es altamente arriesgado.
  2. Por el contrario, el exceso de frío produce hipotermias y congelaciones. En las zonas pantanosas nos pueden devorar los mosquitos y si nos mojamos mientras dormimos podemos contraer pulmonía, aparte de la incomodidad, la ausencia de descanso y el golpe moral que esto supone.
  3. En muchas situaciones de supervivencia y bajo climatología adversa, es la prioridad principal un buen refugio, además de protegernos de los elementos anteriores, proporciona comodidad, seguridad y firmeza psicológica. El tipo de refugio que construyamos dependerá de nuestras necesidades, del tiempo que supongamos que vamos a permanecer en ese lugar, y de las herramientas de las que dispongamos.
  • Siempre deberíamos incluir en nuestro bagaje de utensilios y herramientas:
  1. Una buena navaja o un Tanto (cuchillo), una lámina de plástico de 2x2 metros o similar que ocupa y pesa poco y nos proporciona un techo impermeable (antiguamente se realizaban de totora trenzada). Si el peso no importa, también podemos incluir un hacha pequeña o un machete.
  2. Fósforos o un encendedor de magnesio (hoy ampliamente disponibles en las casas de campismo) ya que funcionan mejor que los fósforos, dando chispa aun mojados (antiguamente se utilizaba la piedra denominada yesca o se encendía fuego mediante frotación de dos maderas).
  • Dónde establecernos:
  1. La luz del sol proporciona calor (lo que no siempre es bienvenido), y ayuda a despertarnos por las mañanas. Sin embargo, las zonas soleadas y libres de obstáculos pueden ser muy ventosas (Tener en cuenta la transferencia de calor: un refugio con un orificio de ventilación demasiado grande no permite mantener una temperatura agradable en el interior).
  2. Los márgenes húmedos de los ríos son cómodos para dormir, pero podemos ser arrastrados durante una tormenta.
  3. También lo son los cauces de ríos secos, pero en cuestión de horas pueden llevar agua y arrastrarnos sin que hayamos advertido la lluvia (incluso si ha llovido a decenas de kilómetros).
  4. Para situar el campamento escójase dentro de lo posible una zona seca, en una protuberancia, no en la zona más baja de la zona, de esa manera evitaremos el agua de inundación y tendremos una mejor perspectiva de la zona en la que nos encontramos.
  5. Evitaremos las zonas cercanas a las laderas, pues suponen un riesgo en caso de lluvia.
  6. Ha de quedar lejos de pantanos, ciénagas, en suma de aguas retenidas, pero no demasiado lejos de algún manantial o río, que nos servirá de reserva de agua fresca. Con estas precauciones, alejamos la molestia de los mosquitos.
  7. Se estudiaran los vientos predominantes, para hacerlo al abrigo de los mismos. El refugio ha de tener su entrada en el lado opuesto al cuál sopla el viento para que sea menos húmedo y, por consiguiente, frío.
  8. Si no sopla el viento ni hay lluvia, hay que fijarse de que lado es más húmedo el tronco de los árboles, arbustos o rocas; pues ese es el lado del cuál sopla generalmente.
  9. Es importante prestar atención a los alrededores para no darnos cuenta, una vez terminada nuestra construcción, que tenemos un hormiguero o un avispero como vecinos.
  10. El fuego ha de estar situado a una distancia prudencial, con el fin de evitar que las llamas alcancen el lugar donde dormiremos. El humo por otro lado, nos ayudara a mantener alejados los mosquitos, aunque puede atraer (el calor) otros visitantes no deseados. Lo mejor es montar el campamento (si se tratase de varias personas) en forma de herradura con la fogata principal en su centro y a unos 2 metros de distancia de los refugios, para aprovechar su calor y estar fuera de peligro de alguna chispa que el viento levante. La fogata ha de estar dentro de un pozo de no más de 20 centímetros de profundidad y rodeada - en la medida de lo posible - con piedras o un montículo de arena, las cuales - en caso de necesitar apagarlo apresuradamente - solo deben ser echados encima del fuego.
  11. En la selva es importante despejar el suelo de las hojas y plantas ya que puede haber roedores o reptiles venenosos.
  12. En caso de encontrarse en un bosque de coníferas (pinos) establecer el refugio dentro de éste o en su borde, ya que el suelo es poco húmedo.
  • El lecho:
  1. En posición tumbada, el cuerpo pierde el 80% del calor por el suelo.
  2. Una parte fundamental de nuestro refugio, es que debe de ser blando, seco, horizontal y caliente (excepto en el desierto, que será fresco).
  3. Siempre que se pueda, tratar de hacerlo un tanto elevado del suelo, así se evita que mientras se duerme sea mordido o picado por alguna especie venenosa. Esto lo lograremos escogiendo bien el emplazamiento (huir de zonas con humedad), quitando los palos y piedras que pueda haber en el suelo, y aislándonos bien de éste con hojarascas, helechos, ropa, etc.
  • Tipos de refugios:
  1. Si nos encontramos en una situación de supervivencia real por haber sufrido un accidente y nuestro vehículo aún está habitable, puede constituir un buen refugio. De lo contrario prestemos atención al material que lleva dentro y que podría servirnos: Los periódicos son un buen aislante; si disponemos de ellos utilicémoslos para cubrir las ventanas y protegernos mejor del frío.
  2. Si necesitamos hacer fuego y no disponemos de cerillas ni mechero podemos empapar con gasolina un trozo de tela, de papel, de esponja de los asientos, etc. y hacer chispas sobre él cruzando los terminales de la batería.
  3. Si quemamos o añadimos aceite de motor al fuego conseguiremos un humo negro y denso excelente para hacer señales y espantar a los mosquitos (principal fuente de enfermedades en algunas zonas).
  • Refugios naturales: Son refugios cuya construcción requiere poco o ningún esfuerzo por nuestra parte. Se improvisan en hendiduras y oquedades de rocas, cuevas, formaciones del terreno y de la vegetación: Una hendidura en una pared rocosa que nos proteja de la lluvia y el viento y no ofrezca riesgos de desprendimientos es ideal. Sólo tendremos que preocuparnos de construir un lecho seco y confortable.
  • Refugios improvisados: Son los que construimos con los materiales que encontramos en la naturaleza o que llevamos en nuestro equipaje. Es muy recomendable aprovechar al máximo las oportunidades que nos ofrece el medio, como puede ser un árbol caído o una fosa que puede ser cubierta con ramas y hojas.
  • Refugio con una lámina de plástico: Si disponemos de una lámina de plástico suficientemente grande podemos improvisar un refugio tendiendo una cuerda entre dos árboles y colocando la lámina como una tienda de campaña clásica. En los extremos envolveremos unas piedras que luego sujetaremos con unas orquillas de madera o las anudaremos y las afirmaremos con cuerdas y piquetas improvisadas con unos palos de madera resistente. Si cavamos una zanja alrededor evitaremos que nos anegue el agua en caso de tormenta.
  • Refugios a "un Agua": Es probablemente el más clásico de los refugios de supervivencia. Utiliza un armazón de madera, pero si utilizamos uno o dos árboles como columnas nos ahorraremos mucho trabajo y el refugio ganará en solidez. En climas fríos utilizaremos un fuego para calentarnos y un reflector de troncos detrás para aprovechar mejor el calor. Por ello es importante tener en cuenta la dirección del viento si no queremos terminar ahumados. El techo lo cubriremos de materia vegetal. En algunas zonas es fácil encontrar grandes hojas con las que construir un techo impermeable ensamblándolas a modo de tejas. También se pueden improvisar tejas con trozos de corteza. Si no, un techo de hierba seca y paja, si es lo suficientemente grueso, también nos proporciona cierta impermeabilidad.
  • Refugio con un árbol caído: Hay que cortar algunas ramas para hacer una oquedad en la copa caída. Es un refugio acogedor y, si el árbol es frondoso, nos protegerá del viento, aunque no de la lluvia.
  • Refugio con soporte de ramas en forma de A: Es otro refugio clásico y que ofrece mayor abrigo que el cobertizo. Se construye con un armazón de palos que adoptan la forma de una tienda de campaña canadiense tradicional o de una A. Se cubre con una capa de hojas grandes a modo de tejas, y por encima de éstas una capa de hierba, hojarasca, ramas que no perforen las tejas para evitar que el viento nos levante el techo.
  • Refugio de tronco: Es un tipo de refugio únicamente apropiado para pasar cortos períodos porque no suele ser muy cómodo, a no ser que el tronco posea un gran diámetro. Consiste en un sencillo cobertizo que se realiza apoyando una serie de ramas sobre un tronco caído y cubriéndolas con los materiales indicados anteriormente. El problema de este refugio serán los insectos que viven asociados a este árbol caído.
  • Plataforma con tela mosquitera: Este refugio nos aísla del suelo y nos protege de insectos. Si se le añade un techo nos protegerá además de la lluvia. El lecho lo cubriremos con hojas de palmera u otra material.

C) Agua:

1.      Los humanos pueden vivir 3 semanas sin comida y 3 días sin agua. Dependiendo de las condiciones climatológicas, se han registrado personas que han estado más de dos semanas sin agua.

2.      En el libro Guinness de records se registra una persona que estuvo 18 días sin agua.

3.      La duración en la supervivencia también depende de las condiciones físicas. Una persona puede perder de 2 a 3 litros de agua por día, más en climas cálidos o tropicales y húmedos.

La deshidratación:

  1. La falta de agua produce la deshidratación, provocando letargo, dolores de cabeza, mareos, confusión e incluso la muerte si el porcentaje de agua perdido es alto (+15%).
  2. La deshidratación reduce la concentración de agua en el organismo y constituye uno de los principales riesgos en medio desértico o zonas muy templadas. Con el fin de evitarlo he aquí algunas recomendaciones:
  • Orina de color marrón o amarillo oscuro es señal de deshidratación.
  • A una temperatura inferior a 38 °C, beber por lo menos 0,5 litros de agua por hora; más allá de 38 °C, se aconseja, por lo menos, un litro de agua por hora.
  • Beber a intervalos regulares, esto reduce el sudor y permite conservar la temperatura corporal.
  • Cubrirse en lo posible con el fin de evitar la exposición de la piel al sol (en particular, la cabeza, la nuca y los brazos). Esto permite conservar la transpiración. En efecto, los trajes absorben el sudor, conservándolo en la piel, lo que da un efecto de frescor a la menor brisa.
  • Evitar hablar y mantener la boca cerrada, respirando por la nariz. Esto permite reducir considerablemente las necesidades de agua.
  • Evitar todo contacto directo con superficies calientes: es mejor sentarse sobre la mochila por ejemplo.
  • Si el agua escasea, se debe evitar comer: la digestión consume agua.
  • En entornos extremadamente secos, es necesario cuidar en extremo la pérdida de agua para evitar la deshidratación:
  • Respirar por la nariz previene que el vapor de agua escape por la boca.
  • No fumar.
  • Permanecer en la sombra y evitar los trabajos extenuantes durantes los días calurosos y soleados.
  • No comer demasiado (el cuerpo humano usa una gran cantidad de agua en la digestión, especialmente para grasas y proteínas).
  • No beber alcohol, ya que ayuda a la deshidratación.
  • Para evitar este riesgo, una prioridad importante es encontrar una fuente de agua potable. Algunas aguas pueden estar contaminadas por la polución o patógenos (ver potabilidad de aguas de subsuelo). Aunque poco puede hacerse contra los contaminantes moleculares, algunas partículas y microorganismos pueden eliminarse hirviéndola antes de consumirla.
  1. Obtención de agua:
  • Mira en el fondo de los valles, hacia donde se drena el agua natural. Si no hay ningún riachuelo o estanque, busca zonas de verde vegetación y excava en ellos.
  • Excava barrancos y en el lecho de ríos secos.
  • En las montañas busca agua atrapada en grietas.
  • En la costa excava por debajo del nivel del mar.
  • Sospecha de los estanques que no tiene vegetación verde alrededor de él o si hay huesos de animales cerca. Comprueba si hay minerales en las orillas, puede indicar unas condiciones alcalinas. Hierve siempre el agua estancada.
  • En el desierto, lagos sin desembocadura se convierten en lagos de agua salada: el agua salada debe ser destilada antes de beberla o producirá loquera.
  • Hay algunas plantas que pueden proveernos de agua. Muchas raíces de árboles y viñas contienen gran cantidad de agua, y puede extraerse colocando fragmentos seccionados en un recipiente.
  • No utilices líquidos vegetales turbios, lechosos o de colores.
  1. Se puede recoger agua por los siguientes métodos:

·         Transpiración - recogiendo el agua transpirada por medio de bolsas de plástico.

·         Usando un destilador solar.

·         Derritiendo hielo.

·         Recogiendo agua de lluvia (mediante toldos recolectores con canalizaciones a barriles, de las hojas de las plantas, de oquedades de troncos, etc.).

·         Haciendo un pozo en el terreno (si es en zona costera, hervirla antes de consumir para desanilizarla).

·         Recoger rocío de plantas y céspedes

·         El agua de lluvia (que normalmente es potable) puede recogerse en recipientes. Usa un área de recogida lo más amplia posible, haciendo que el agua discurra hacia envases.

·         Un agujero en el suelo recubierto de barro, puede almacenar agua. Si no disponemos de estas fuentes, será necesario más ingenio.

·         La ropa puede usarse para recoger el rocío y la humedad de céspedes y plantas. Usar una camiseta atada al tobillo y andar sobre la hierba al amanecer o atardecer y escurrir para recogerla. Este es un método muy eficaz para obtener agua. El agua estancada puede potabilizarse por filtración usando un colador con carbón activo.

·         Con una trampa de condensación:

·         Cavar un agujero circular poco profundo, en el fondo del cual se coloca un recipiente (vaso, cacerola).

·         Tapar el agujero en su totalidad con un trozo de plástico de forma cuadrada o redonda. El plástico, ligeramente destensado para poder poner un pequeño peso en el centro de este, debe formar un cono que apunte hacia abajo; la punta debe encontrarse encima del recipiente.

·         Para sujetar los bordes del plástico y que no caiga, simplemente recubrirlos con arena o colocar piedras, debe quedar bien sellado para dejar escapar la menor cantidad de agua.

·         El agua contenida en la tierra y el aire se condensará durante la noche sobre la superficie del plástico y fluirá hacia el recipiente.

·         Si te es posible agrega agua que no puedas beber por su contenido ejemplo: agua salada, estancada, alcalina, orina, etc... (no será la más rica que hayas probado, pero será agua bebible).

·         El sol elevará la temperatura del aire y de la tierra, produciendo vapor. El agua se condensará por la parte de abajo del plástico y caerá en la lata.

·         Este método es muy efectivo en zonas donde el día es muy caluroso y la noche fría. De esta manera se puede llegar a recoger hasta 550ml. en 24h.

·         Este método también sirve como trampa. Los insectos y pequeñas serpientes atraídos por el plástico caerán en él o en el agujero y no podrán salir. Recomiendo que si utilizas este método pongas unos cuantos ya que necesitas mínimo 2 litros de agua al día.

  • Agua de hielo y nieve:
  1. Nunca se debe ingerir hielo o nieve, ya que pueden producir quemaduras en la boca y los labios, impidiéndonos la posterior ingesta de alimentos, así como beber líquidos, además también nos exponemos a que se infecten las quemaduras.
  2. Se obtiene más agua del hielo que de la nieve. Para calentar la nieve, derrite primero una pequeña cantidad en un cazo y luego ve añadiendo más. Si llenas todo el cazo de nieve, se formará un hueco en el interior a medida que la nieve se derrite y se quemará el cazo.
  3. En caso de no disponer de este sistema para derretir el hielo podemos llenar nuestra cantimplora con el hielo o la nieve e introducirla entre dos capas de ropa que llevemos puesta para que se derrita con el calor corporal, es muy importante que la cantimplora no nos toque la piel ya que podría quemarnos también.
  4. Las capas de nieve más próximas a la superficie producen menos agua que las capas más profundas.
  5. Aunque no se debe beber agua salada, si te encuentras cerca de una playa se puede obtener agua potable en el lado opuesto al mar en una duna descendente.
  6. Bajo el nivel del mar, la arena hace de filtro de parte de la sal. Puede que tenga un sabor salado o salobre, pero la arena actúa como filtro reduciendo en un futuro las sales que contiene el agua de mar cuando se cava en la tierra.
  • Destilación:
  1. En un recipiente tapado y lleno de agua, pasa un tubo.
  2. Pon el recipiente a calentar en el fuego.
  3. El otro extremo del tubo ponlo en otro envase que también esté bien cerrado. Este último envase debe estar a su vez dentro de otro que deberá estar lleno de agua fría que servirá para enfriar el vapor que sale por el tubo.
  4. Para evitar perder agua evaporada, sella las juntas del tubo con barro o arena mojada.

Obtención de agua de la orina con destilador solar: También se puede obtener agua potable a partir de la orina, si se dispone de dos botellas vacías y cinta adhesiva, creando un sencillo destilador solar:

  1. Llenar a la mitad una botella de orina. No hay que llenarla demasiado de modo que la orina no se salga de la botella cuando se coloque horizontalmente en el suelo.
  2. Pegar la boca de la botella vacía a la de la botella que contiene la orina.
  3. Poner horizontalmente las botellas sobre el suelo para dejar la botella que contiene la orina completamente expuesta al sol y recubrir con arena la botella vacía.
  4. El sol extraerá el agua de la orina por evaporación. La segunda botella, protegida del sol porque está recubierta con arena, tendrá una temperatura inferior a la de la primera. El agua evaporada en la primera botella pasará a la segunda.
  5. También puede usarse para destilar agua si se sospecha que puede estar contaminada.

Obtención de agua de vegetales:

  1. Los árboles pueden extraer la humedad desde una profundidad de 15m. Lo cual es demasiado profundo para excavar. Así que deja que el árbol la bombee hacia arriba para ti.
  2. Para recoger el agua, ata una bolsa de plástico alrededor de una rama que tenga hojas verdes y estén en buen estado. La evaporación de las hojas producirá condensación en la bolsa. Mantén la boca de la bolsa hacia arriba y una esquina colgando hacia abajo para recoger esa agua.
  3. También puedes colocar polietileno a modo de tienda de campaña sobre una planta. Para ello suspende la tienda de campaña desde arriba o sostenla desde dentro con un palo. Evita que las hojas toquen los lados de la tienda o desviarán las gotas y no las podrás recoger en los canales de plástico de la base.
  4. Incluso si cortas plantas, se producirá la condensación cuando las coloques dentro de una bolsa de plástico grande. Mantén las hojas elevadas del suelo mediante piedras, para poder recoger el agua debajo de ellas. Tampoco dejes que las hojas toquen los lados de la bolsa. Tensa la bolsa con piedras. Si colocas la bolsa en un lugar que tenga una ligera inclinación, las gotas irán pendiente abajo y podrás recogerlas.
  5. Del pino se puede obtener agua mordiendo las puntas de las hojas (púas), ya que retienen el agua.
  6. Un mito de la supervivencia es que de láminas de cactus se puede obtener agua potable: aunque muchos cactus sí poseen fluidos en su interior, es una solución altamente ácida y puede inducir el vómito si se bebe. Muchos cactus poseen fluidos altamente tóxicos para el hombre.
  • Plantas:
  1. Las plantas suelen recoger agua en cavidades. Los huecos del bambú se llenan de agua: agítalos y si oyes moverse agua, corta el bambú por la base de cada junta y extrae el agua que hay en su interior.
  2. Las plantas con forma de copa recogen agua, pero primero debes retirar los posibles insectos y escombros que pueda contener.
  • Vides:
  1. Las vides que tienen una corteza áspera y brotes de 5 cm de grosor pueden contener agua bebible. Pero hay que tener precaución ya que no todas contienen agua bebible e incluso algunas pueden contener savia pegajosa y de aspecto lechoso que es venenosa.
  2. Algunas vides causan irritación al tocarlas, así que lo mejor es recoger el líquido en un recipiente o dejar que caiga directamente en la boca pero sin tocar el tallo.
  3. Para obtener el agua de la vid elige un tallo y practicarle un corte en la parte más alta que puedas. Hazle otro corte en la parte más baja y deja que el agua vaya goteando.
  4. Cuando pare de gotear corta una sección de la rama en la base y vuelve a repetir la operación hasta que esté drenada por completo.
  • Palmeras:

1.      Las palmeras contienen un líquido azucarado llamado guarapo que se puede beber. Para conseguir que empiece a fluir el líquido, dobla la palma hacia abajo y corta la punta.

2.      Si cada 12:00 horas realizas un corte de un trozo pequeño de la punta, el líquido volverá a fluir permitiendo obtener 1/4 de litro cada día.

3.      La leche de cocos maduros es un poderoso laxante, de modo que beber mucho puede hacerte perder demasiado líquido.

  • Cactus:
  1. El agua permanece en los frutos y en la pulpa, pero ten en cuenta que algunos cactus son venenosos.
  2. Evita el contacto con los pinchos, ya que estos luego son difíciles de extraer y pueden producir dolorosas heridas supurantes.
  3. Aquellas que tienen una corteza áspera y brotes de 5 cm de grosor pueden contener agua bebible.
  4. Pero hay que tener precaución ya que no todas contienen agua bebible e incluso algunas pueden contener savia pegajosa y de aspecto lechoso que es venenosa.

Animales como indicadores de agua:

  1. La sangre animal no sirve para rehidratarse, de hecho debe evitarse. Además, debido a los nutrientes que contiene, requiere energía para su digestión.
  2. Todos los mamíferos poseen patógenos en su sangre, por lo que deberían ser cocinados.
  3. La orina contiene sales y toxinas, pero puede procesarse en un destilador solar.
  4. Muchos pájaros, mamíferos, y algunos insectos como abejas, hormigas, y moscas, son indicadores fiables de la presencia de agua, riachuelos o charcos.
  • Mamíferos:
  1. Muchos animales necesitan agua regularmente. Los animales que pacen normalmente nunca están lejos de agua, ya que necesitan beber desde el amanecer hasta el anochecer.
  2. Si haces converger las huellas de animales herbívoros te conducirán hacia agua. Los animales carnívoros no son buenos indicadores, ya que obtienen líquidos de sus presas.
  3. Su orina es potable.
  • Insectos:
  1. Las abejas son buenas indicadores, ya que no vuelan a más 6,5 km de su colmena y siempre se encuentra cerca del agua.
  2. Las hormigas también dependen del agua, una columna de hormigas subiendo por un árbol puede estar yendo hacia una pequeña reserva de agua estancada. Este tipo de reservas se encuentran incluso en zona áridas.
  • Reptiles:
  1. Recogen cualquier pequeña gota que necesitan de sus presas o del rocío. No son buenos indicadores.
  • Aves:
  1. Las aves que comen grano nunca están lejos de agua, cuando vuelan bajo y recto es que van directos hacia agua. Cuando vuelven de beber vuelan de rama en rama, descansando regularmente.
  2. Las aves acuáticas y las aves de rapiña no beben con frecuencia y, por lo tanto, no son buenos indicadores.
  3. Las aves silvestres y salvajes en su medio natural nunca vuelan en dirección a una población, por lo que, de encontrarte en esta situación debes saber que con una alta probabilidad, hay una población humana hacia el lado contrario del vuelo de dichas aves.

D) La sal:

  1. La sal es esencial para la supervivencia del hombre. Una dieta normal requiere una ingesta diaria de 10 gr. El cuerpo pierde sal al sudar y al orinar, por lo que es necesario reemplazar esa pérdida.
  2. Los primeros síntomas de falta de sal son: calambres musculares, nauseas y cansancio. El remedio es tomar una pizca de sal en 1/2 litro de agua. Puedes llevar tabletas de sal en tu botiquín. En este caso sólo tienes que romperla y disolverla en la cantidad de agua apropiada. No la ingieras entera ya que puede causar dolores de estómago y daños en el riñón.
  3. Si tus reservas de sal están bajas y estás cerca del mar, el agua salada contiene aproximadamente 15 gr/lt de sal, pero no te la bebas tal cual. Dilúyela en agua fresca para hacerla bebible, o evapórala para obtener los cristales de la sal.
  4. Si no encuentras ninguna manera de obtener sal, puedes recurrir a la sangre de los animales, la cual es una valiosa fuente de minerales.

E) Orientación:

  1. El método fundamental para la orientación está basado en la relación entre el horizonte y la posición de los astros.
  2. Cuando no se dispone de una brújula para ubicarse, solo se puede confiar en los métodos de emergencia; la opción más acertada es hacerlo con un reloj de agujas:

- Ubicar el ángulo formado por la aguja de las horas y la posición de las 12:00 horas.

- Marcar la bisectriz del ángulo.

- Apuntar la bisectriz hacia el sol.

- No olvidar que las 12:00 horas apuntan hacía el sur y las 06:00 horas apuntan hacia el norte.

  • Durante el día:

·         Durante el día podemos orientarnos en relación al norte geográfico dependiendo de la posición del sol, sabiendo que éste sale por el este y se pone por el oeste.

·         Teniendo en cuenta su ubicación con respecto al horizonte marítimo en el amanecer, podremos calcular la posición del norte y el sur geográfico sabiendo que el norte estará a 90º hacia la izquierda, así como el sur estará a 90º a la derecha y, por consiguiente, el oeste se encontrará a 180º, en la parte opuesta.

·         De día también podemos conocer nuestra longitud, siempre y cuando dispongamos de algún reloj o método para conocer la hora exacta en alguna zona o huso horario del globo.

·         Teniendo en cuenta la hora del reloj y el huso horario con el que ha sido sincronizado, tendremos en cuenta que la posición del sol a las 12:00 del medio día es completamente vertical; de modo que, sumando o restando las horas de diferencia entre el reloj y la posición solar, podremos calcular nuestra longitud teniendo en cuenta que una hora de diferencia equivale a 15º de meridiano.

  • Durante la noche:

 

·         Durante la noche podremos orientarnos conociendo la posición de los puntos cardinales y nuestra latitud. Dependiendo del hemisferio en el que nos encontremos tendremos que utilizar unas constelaciones u otras para orientarnos.

·         En caso de encontrarnos en el Hemisferio Norte, tomaremos como referencia la Estrella Polar, que es la más cercana al polo norte geográfico en la bóveda celeste. Será más fácil de encontrar si se conocen las constelaciones, siendo dicha estrella la "cola" de la Osa Menor.

·         En caso de encontrarnos en el Hemisferio Sur tendremos que tomar como referencia la constelación conocida como Cruz del Sur.

·         Para calcular nuestra latitud necesitaremos un sextante que, en caso de carecer de él, podremos improvisar. La función del sextante es darnos el ángulo formado entre la posición de dos cuerpos y la nuestra, de modo que, tomando como referencia el horizonte marítimo, hallaremos el ángulo de la Estrella Polar o la ubicación señalada por la Cruz del sur, sabiendo que el ángulo resultante será equivalente a nuestra latitud.

·         Teniendo en cuenta que en el Ecuador nuestra latitud será 0º, en el Polo Norte será 90º y en el Polo Sur -90º.

 

F) Técnicas para hacer fuego:

  1. Existen numerosas técnicas para hacer fuego. Las más antiguas utilizan el calentamiento de la madera por fricción o la producción de chispas por medio de un sílex y una piedra ferrosa (es decir, que contiene hierro).
  2. Existen métodos antiguos que se remontan al Paleolítico, como la fricción o la percusión, y métodos modernos como el empleo de cerillas o fósforos, encendedores, arcos eléctricos o incluso la luz solar.

G) Métodos para conseguir alimento:

  1. Con la importancia de saber reconocerlas, encontramos plantas comestibles como la consuelda (que ayuda a cicatrizar las heridas y evita el sangrado en caso de hemorragia), las bellotas, frutos del bosque (arándanos, calafates, endrinas o arañones, frambuesas, moras, grosellas, zarzamoras...), etc.
  2. Sin embargo, hay que tener buenos conocimientos de botánica, pues algunas plantas tóxicas pueden parecerse a plantas comestibles.
  3. También es posible cazar animales o pescar, para consumir su carne cocinada.

H) Cabullería: El conocimiento de los nudos básicos es indispensable en un campamento de supervivencia ya que sirven para construcciones, pesca, caza, arrastre, etc.

 

1.      Cabullería es el arte de realizar nudos, y la habilidad que conseguimos mediante la practica para poder utilizar cuerdas y cordeles en las diversas actividades; adaptándolas usando los nudos mas apropiados en cada caso.

2.      La palabra Cabullería proviene de "cabuya", un material muy usado hace algunos años para la confección de cuerdas.

3.      La palabra cuerda proviene de la voz latina "chorda", cuyo significado es "cáñamo", material que era muy usado en la confección de cuerdas.

4.      Recordemos que una soga es básicamente un conjunto de hilos retorcidos formando un solo cuerpo largo y más o menos flexible.

5.      Las cuerdas para los yumi se hacen trenzando tripas de los animales que cazamos para comer y luego dejándolas secar al sol tensada, de esa forma se fabrica un tiento resistente, elástico, totalmente natural, y que las presas no huelen como peligroso a distancia.

 

I) Inro: dentro de nuestro botiquín personal de primeros auxilios debe ir todo lo necesario para poder curarse uno mismo en caso de accidente, a saber:

 

·         Alcohol blanco.

·         Mercurio cromo.

·         Yodo.

·         Agua oxigenada.

·         Gasas.

·         Venda de gasa.

·         Venda elástica.

·         Apósitos (curitas).

·         Cinta adhesiva.

·         Calmantes: píldoras y cremas.

·         Suero común.

·         Algodón.

·         Pinza de depilar (para quitar restos de piedras incrustadas y/o aguijones de insectos).

·         Tijera pequeña o bisturí.

·         Hilo de coser y aguja (el hilo preferentemente de nylón, y la aguja curva, por las dudas que haya que suturar alguna herida).

·         Cinta hilera (esta se usa en caso de tener que entablillar por alguna quebradura).

·         Suero antiofídico (en caso de ir a zonas donde hay serpientes venenosas).

·         Jeringa con agujas desechables (no menos de 5 agujas).

·         Cloroformo o similar.

 

Algunos consejos útiles: En caso de no contar con un inro debidamente equipado.

 

1.      En caso de afecciones oculares, mezclar 1 parte de savia de aloe (el jugo, no la pasta) con 3 partes de suero común, colocarse una gota en cada ojo antes de dormir. Arde un poco pero es 100% efectivo.

2.      La savia del aloe se oxida y pierde sus propiedades en escasos minutos, una vez que se corta la hoja de la planta. Quitar rápido su zumo y guardarlo en un frasco opaco fuera del alcance del sol es la única forma de mantener sus propiedades por 2 o 3 días. Es un excelente calmante y cicatrizante para cualquier tipo de rasgaduras de la piel (sobretodo colocando la pasta sobre la herida).

3.      El zumo de tomate es excelente para quemaduras por efectos del sol.

4.      En caso de picaduras de insectos, frotarse romero sobre la picadura la calma y baja la inflamación.

5.      El agua de coco (de palma) se puede utilizar a modo de suero para intravenosas (en caso de no tener suficiente al alcance de la mano), aparte de ser una fuente de agua para beber.

6.      En caso de necesitar un anestésico natural se puede utilizar: el polen de la flor de mburucuyá (adormidera o pasionaria) en forma de humo (quemándolo), una infusión de sus pétalos (que es más suave), o una infusión de hojas de cannabis sativa (marihuana).

7.      Calentar una cucharadita de aceite de cocina con bichitos de la humedad (bichos bolita) y dejar entibiar para utilizar en afecciones a los oídos. Es calmante y antiinflamatorio.

8.      La baba de caracol es un excelente cicatrizante para quemaduras de aceite y/o grasas.

9.      Para parar una hemorragia se puede utilizar azúcar, la cual se puede encontrar en el interior del yuyo conocido como “7 estrellas”, cuya infusión es calmante también. Abrir el tallo, colocarlo sobre la herida y sujetarlo de forma que no se mueva para que actúen sus propiedades.

10.  Para bajar la fiebre la infusión de borraja es lo mejor.

11.  Para calmar los ardores de garganta beber infusión de salvia de flor azul, guaco, o una mezcla de ambos.

12.  La salvia de flor de colores rojo y amarillo, es buena para calmar los nervios estomacales (cólicos); y la de flor azul y blanco para calmar dolores e infecciones de garganta.

13.  Para mitigar un ataque hepático (dolor de hígado) el zumo de alcachofa (cardo) es excelente para calmarlo. Si es por estreñimiento comer ciruelas hervidas o fruto de ombú (tener en cuenta que ambos lo vaciarán por completo); si por el contrario es porque esta con diarrea comer solo arroz hervido sin ningún aditivo extra y beber agua de arroz (el cuál lo secará).

14.  El zumo de aloe es un digestivo natural, se puede beber aunque es extremadamente amargo.

15.  Para limpiar los pulmones en caso de intoxicación por humo, masticar hojas de berro silvestre. Ayuda a calmar el ardor y expectorar las flemas creadas por el calor.